Una de las características del Impresionismo son sus pinceladas gruesas que al alejarnos componen la imagen y nos recuerda constantemente que podemos ver tanto el detalle —pinceladas individuales—, como la forma completa —el paisaje. La mirada estratégica permite justo eso: ver el panorama completo o los detalles aislados. Claude Monet, Banks of the Seine, Vétheuil, 1880, National Gallery of Art, Washington.